Diseñar una iluminación correcta en nuestras calles, carreteras, parques o jardines de un municipio, se debe tener en cuenta los niveles mínimos de iluminación necesarios para el desarrollo de las actividades que tienen lugar en estos espacios, promoviendo la seguridad y comodidad de los usuarios pero evitando la contaminación lumínica.

La iluminación vial brinda sin ninguna duda una alternativa sencilla y económica, para  contrarrestar en gran medida los consecuentes y peligrosos accidentes de tráfico. Éste es un método de seguridad efectivo para todos conductores, transeúntes y peatones de las zonas urbanas y rurales,  ya que aseguran que transitar por vías correctamente iluminadas les genera mayor confianza. Es por este motivo, que tanto asociaciones de vecinos, como administraciones locales, diputaciones, siempre debe ser una obligación.

 

¿Qué es la iluminación Vial?

 

Industria iluminación y la UE luchar pr disminuir el impacto medioambiental, alumbrado personalizable a medida para el cliente

Conseguir un consumo energético eficaz, alcanzar un impacto ambiental mínimo y lograr una inversión razonable. Algo por lo que muchos ayuntamientos luchan por conseguir en sus  municipios.

La iluminación LED cumple con estas expectativas, además  reduciendo el consumo, y facilitando la eficiencia energética sin que sin que los niveles lumínicos se vean alterados y protegiendo el medio ambiente.

Para conseguir una iluminación sostenible, se debe escoger el tipo de lámpara que proporcione los parámetros correctos de funcionamiento por el fabricante.

Por eso es importante tener en cuenta las energías renovables como la utilización para las farolas lámparas de jardines o carreteras la energía solar fotovoltaica mediante paneles.

Además se deben estudiar aquellas zonas que implican un mayor estudio por el rigor de sus emplazamientos, es decir, paseos, escaleras, glorietas, áreas de estancia estos espacios deben tener en cuenta los criterios y niveles mínimos de iluminación establecidos para el alumbrado, ya que deben favorecer la visión sin que sean dañinas perjudiciales o dificulten la comodidad de los viandantes o conductores.

El alumbrado debe ser homogéneo y la iluminación que no sea excesiva para no crear contrastes de luz y sombra que alteren la estética de estos espacios. Sin olvidar, la ubicación y orientación de las luminarias no produzca deslumbramientos para los transeúntes.

 

Técnicas para reducir costes y volver la ciudad más sostenible

 

La instalación de sistemas de control de encendido y apagado forman una gran ventaja para producir ahorros entre el 10 y el 30%., pudiéndose controlar según las necesidades del entorno.

Este sistema consiste en integrar interruptores con horarios astronómicos o con sensores lumínicos que están especialmente diseñados para controlar la carga luminosa en función de las horas a las cuales amanece y anochece en las diferentes épocas del año.

También podemos integrar  reactancia de doble nivel, que variará la impedancia del circuito individualmente en cada una de las luminarias, adaptando el flujo luminoso a las necesidades particulares de cada medida, o la implantación de reductores de flujo luminoso en cabecera, con el objetivo de disminuir la intensidad lumínica a partir de determinadas horas de la noche, en las que la actividad ciudadana se reduce al mínimo.